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La línea de Inclusión Biosociocultural, a través de Macarena García, junto a investigadoras de Reino Unido, México, Guatemala y Egipto, se reunieron analizar el trabajo que realizan con literatura y migración.
(22-03-18) Esta semana se llevó a cabo en Glasgow, Escocia, el tercer encuentro de la red “Children’s Literature in Critical Contexts of Displacement” que reúne a investigadores trabajando con niños, niñas, y jóvenes en contextos de migración.
La red, coordinada por la profesora Evelyn Arizpe, de la Universidad de Glasgow, ha desarrollado estudios, intervenciones, y talleres para apoyar a voluntarios y mediadores de lectura trabajando con comunidades marginalizadas o grupos específicos de migrantes. La red opera a través de convenios de cooperación con universidades y ONGs produciendo conocimiento acerca de posibilidades y desafíos en espacios de educación no-formal, como centros comunitarios, intervenciones temporales y campamentos de refugiados, entre otros.
El trabajo en estos espacios abre posibilidades para abordar tanto las necesidades de niños, niñas, jóvenes y familias desplazadas, así como de poblaciones locales que viven en condiciones de marginación y pobreza. La red desarrolla métodos de investigación e intervención basados en artes buscando entender cómo producir espacios y prácticas hospitaliarias, contribuir a la educación contra la xenofobia y fortalecer desarrollos comunitarios.
A través de colaboraciones con universidades, quienes a su vez establecen vínculos con ONGs, se han desarrollado programas de intervención con literatura y artes, utilizando libros-álbum —y libros silentes, sin texto verbal— para producir encuentros de lectura y activar posibles otras formas de comunidad y socialidad.
Macarena García, Investigadora de la Línea de Inclusión Biosociocultural, participa de esta red y desarrolla una colaboración con la ONG Techo para desarrollar bibliotecas y programas de lectura en campamentos. En la reunión en la Universidad de Glasgow, nueve investigadoras —trabajando en Reino Unido, México, Guatemala y Egipto, además de Chile— proyectaron el trabajo futuro de esta red en relación a publicaciones y postulaciones a fondos de investigación, así como en relación al trabajo con ONGs y la vinculación con organismos internacionles.
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