Señor Director:
La alerta pública del profesor UC Francisco Gallego sobre los resultados de una evaluación de impacto al programa Habilidades para la Vida (HpV), que arrojó que no ha logrado los efectos esperados, revive un disputado debate. Esto, considerando que este programa nacional de salud mental en escuelas también cuenta con evidencia favorable sobre el logro de sus objetivos, según mencionaron las académicas Loreto Leiva, Verónica López y el académico J. Michael Murphy a la opinión pública.
Esto nos lleva a plantear la ya antigua discusión sobre el estatus de la evidencia para el diseño de políticas públicas. ¿Es más útil la evidencia que se produce en estudios causales? ¿Se considera evidencia aquellos datos producidos en estudios etnográficos? Dado que contamos con múltiples perspectivas teóricas y metodológicas para producir evidencia en educación, esta discusión se mantiene en pié a pesar de su larga data. Sin duda que la articulación entre evidencia producida en la investigación y cómo ésta alimenta las políticas públicas es altamente significativa por las consecuencias que conlleva. Es por ello que desde el Centro de Justicia Educacional (CJE) consideramos fundamental dialogar sobre qué tipo de evidencia sirve con mayor fuerza para el logro de la transformación en espacios escolares.
Ante tal escenario, invitamos a seguir el Diálogo para la Justicia Educacional que tendremos este miércoles 24 de mayo, donde conversaremos sobre diferentes posiciones acerca de qué evidencia sirve mejor al propósito de las políticas sobre bienestar estudiantil.
Claudia Matus Cánovas
Profesora Titular Facultad Educación UC
Directora Centro Justicia Educacional
