El proyecto busca explorar el uso de tecnologías y plataformas de comunicación en comunidades escolares y cómo, a partir de ello, se producen estereotipos y discriminaciones de las familias, los estudiantes y el cuerpo docente.
El martes recién pasado la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo, Anid, entregó los resultados del concurso Proyectos Fondecyt de Iniciación en Investigación 2020.
En la oportunidad, nuestra investigadora postdoctoral, Camila Moyano, obtuvo el financiamiento para su proyecto “Tecnologías digitales de comunicación en educación: estereotipos y discriminaciones de profesores/as, padres, madres y estudiantes”. El trabajo indagará en las prácticas de vigilancia que generan las tecnologías digitales comunicacionales utilizadas por las escuelas y las familias, y cómo éstas producen ciertas formas normativas de la parentalidad, del ser estudiante y de ser profesora o profesor.
Moyano explica que el proyecto “tiene como objetivo estudiar el uso de diferentes tipos de tecnologías digitales que apoyan la comunicación entre las familias y las escuelas y entre las mismas familias de niños y niñas de jardín infantil, quinto básico y primero medio en escuelas privadas y públicas de Arica, Santiago y Punta Arenas, con el fin de analizar las prácticas de vigilancia que generan en apoderados/as, docentes y estudiantes. Nos enfocaremos en aplicaciones desarrolladas específicamente para la comunicación entre escuelas y familias, grupos de WhatsApp para padres y páginas públicas de Facebook de escuelas y docentes”, señala.
Es muy poca la evidencia que hay sobre las consecuencias que tiene el uso de estos dispositivos en la educación. Por ello, el estudio utilizará un enfoque teórico vinculado a las teorías socio-materiales con el fin de mostrar cómo estos aparatos tecnológicos no son neutrales y producen formas “ideales” de comportamiento.
Justamente, esta determinación de conductas estaría asociada a normalizar formas de relacionarnos con la diversidad cultural en la que vivimos. “Estas formas “ideales” han sido vinculadas, por la literatura, a un \»estado de vigilancia\» que generaría el uso de estas tecnologías. Lo que a su vez produciría formas de ser adecuadas respecto del género, la etnia, la clase social y las capacidades tanto de estudiantes como de apoderados y docentes”, explica Camila Moyano.
El estudio
La investigadora postdoctoral de CJE explica que “para lograr el objetivo se aplicará una metodología cualitativa utilizando las narrativas de los actores y los aspectos materiales del uso de las tecnologías comunicacionales. En particular, se realizarán etnografías digitales, luego se desarrollarán entrevistas con los desarrolladores de las tecnologías, con docentes y apoderados y grupos de discusión con los/as estudiantes”, aclara. El objetivo es generar cartografías visuales que den cuenta de las relaciones entre las narrativas y los aspectos tecnológicos de las plataformas.
El proyecto se desarrollará durante tres años (2021-2023) y contempla colaboraciones con el Dr. Mathias Decuypere quien es profesor asistente de Metodología en el Grupo de Investigación en Ciencias de la Educación dentro de la Facultad de Psicología y Ciencias de la Educación, KU Universidad de Lovaina, Bélgica.
El Dr. Decuypere tiene vasta experiencia trabajando con aplicaciones educativas con un enfoque sociomaterial y ha utilizado esta aproximación para desarrollar un trabajo interesante en metodologías visuales.